En 1998, una PC con 128MB en RAM, un procesador Intel Celeron de 733mhz y un disco duro de 20GB, quizá era más increíble que un auto deportivo. Pero, sinceramente, hoy es una buena candidata para irse a la basura. Ese iba a ser el destino de la PC en la que ahora estoy escribiendo, que decid’i adoptar.
Creí que instalar un viejo sistema operativo sería una opción viable, considerando que un sistema operativo antiguo podría funcionar mejor en una máquina antigua. Sin embargo, foreando (leyendo foros), supe que era una mala idea, pues una distribución antigua ya no está soportada, por lo que no será muy funcional, y hasta resulta débil en seguridad. Por ese motivo, opté por buscar una distribución de linux ligera que la pudiera arrancar sin problemas.
Hasta ahora, he descargado 5 distribuciones y quemado en disco duro para probar 3:
Al probar las tres distros disponibles, tuve problemas con la máquina, pues no quería arrancar apropiadamente ninguna de ellas. Creí que era por problemas de compatibilidad con el procesador, pero al menos para Xubuntu y Puppy Linux, ese no era el caso. De Debian, no sé. Se supone que Debian dejó de hacer SOs compatibles con procesadores de la familia 386 desde Surge, y no estoy seguro si el procesador es de esa familia, o es 486.
Xubuntu no pudo obtener la hora desde servidor, y por eso detuvo la instalación. Un hecho vergonzoso para la familia Canonical LTD, seguro. Lo probaré posteriormente.
Puppy Linux, después de solucionado quién sabe qué conflicto con el BIOS, marchó perfectamente. Su instalación es bastante sencilla, por lo que linuxeros newbies como yo pueden realizarla sin problemas…. Sin embargo, los desarrolladores de Puppy les parece muy «old-fashioned» instalar Puppy, por lo que dan un tutorial de como no instalar Puppy. Este SO, como otras minidistribuciones de linux, no requieren de disco duro para funcionar. Y con Puppy, no sólo no se requiere, sino que le es posible guardar cambios realizados, aunque algunas de esas opciones están aún en fase de experimentación, como lo es guardar datos en el mismo Live CD desde el que funciona Puppy.
Ahora, tengo una PC resucitada con SeaMonkey y AbiWord, con la posibilidad de descargarle Firefox y OpenOffice, y demás programas, que apenas consume recursos, y que me recuerda lo paciente que fuimos al trabajar con procesadores de 733 mhz.
Sí, tampoco esperen volver una vieja PC en un supercomputador solo por instalar una minidistro de Linux.